sábado, 24 de septiembre de 2016

Te dejo en un rincon de mi corazon...


Estos días ham sido de mucho pensar en el pasado mes de febrero. En esas semanas de reposo, de manchados, de encierro en casa. En esas primeras ecografias que me dieron esperanza y en esa en donde me dijeron que el corazon de mi chiquitin no latia con fuerza.
Aun en perspectiva sigue siendo el 17 de febrero el peor dia de mi vida.
Y paradojicamente el día que realmente sufrí una verdadera transformación. La fertilidad te cambia... Y mucho. A mi el aborto me transformo radicalmente.
Tocar fondo, el mas profundo, verlo todo tan absurdamente negro en mi vida, me sumergió en el momento mas triste de mi vida, pero al salir me encontre renovada.
La pérdida de aquello que mas quería me hizo darme cuenta de todo lo que tengo y no había sabido valorar.
Y morí y volvi a nacer....
Desde que me recupere, tengo muchos momentos malos. El miedo me asecha cuando menos lo espero. Pero aprendí que no todo son desgracias, tambien hay muchas bendiciones.
Necesito no recordarte tanto amor mio, necesito que no me invada el miedo cada vez que recuerdo esos días tan tan dolorosos.
Necesito que solo me quede la enseñanza que me dejaste.
Necesito poder caminar junto al miedo pero seguir avanzando e imaginar que llego a la meta.
Merezco ser feliz, merezco cumplir no este sino todos mis sueños...
Dicen que quien sueña y cree con el corazón, el universo siempre busca la forma de complacerle.
Me has enseñado tantas cosas, me habria gustado no tener que pasar por todo eso... Pero era la manera... Tenía que ser así.. Parece que todas las lagrimas previas no habian sido suficientes para llegar a ser quien tengo que ser.
Sabes amor? A veces siento que no pensar en ti es como traicionarte. Pero no! Tengo que dejarte en un rinconcito de mi vida, espero que lo entiendas. Tengo que coger todo eso que me has enseñado, lo bueno y guardarlo en mi mochila de viaje y tu cariño mio,puedes quedarte en un rincon de mi corazón. Siempre tendrás un lugar alli. Pero debo y quiero dejar un espacio bien grande para mis nuevas ilusiones, mis nuevas alegrias, mis nuevas aventuras.
Gracias, de verdad gracias.... Viniste por un motivo... Y lloré, lloré tanto que pense que me ahogaba y sufrí, sufrí tanto que pense que me rompía por dentro. Pero salí a flote... Renací y he vuelto a ser feliz.
Me despido mi chiquitin, te quise, te quiero, te querre. Nunca te sentí realmente mío, supongo que mi corazón de madre sabía que no habías venido a quedarte, aún así luche por tí con todo mi amor.
Ha llegado la hora de descansar, de dejarte partir.
Ahora toca dar la bienvenida a nuevas ilusiones, a nuevos amores, a nuevas esperanzas...
Hasta siempre....

No hay comentarios:

Publicar un comentario